jueves, 26 de noviembre de 2009
i miss the playgrounds
No solemos parar a pensarlo, porque solemos llenarnos el día con mil mierdas para no poder hacer ese STOP N GO. El mundo no es un lugar bonito, la vida no es alguien maravillosos que nos cuida y protege. El mundo es un lugar absurdo, y es nuestra culpa imagino, pero eso no deja de hacer que sea un auténtico vertedero. Como dejar una casa llena de hermosos jarrones y cosas caras a una pandilla de niños traviesos, así nos fue entregado este mundo. No hay más que abrir los periódicos, que envcender la tele, que mirar por la jodida ventana. El libro de Sarah Palin es el segundo más vendido en amazon.com, mientras miles de escritores anónimos escriben sin parar buscando esa oprotunidad que de forma a su futuro. E l siguiente puesto es la biografía de Agassi. Le adoro, pero no me jodas que vendes más libros que Dickens y sólo hablas de q te metiste un pokito y usaste peluka. Si hiciese yo un libro de lo que me he metido, los sitios donde he acabado, las movidas que he tenido y las ganas de volarme la jodida cabeza que me han entrado no vendería más de 20 copias. Ni siquiera nos da morbo ya el mal ajeno. Ya es imposible casi entender al mundo. Se la hemos metido tantas veces por el culo que no lo reconoce ni la madre que lo parió.
Zana fue un tipo africano con el que trabajé. Era callado como una mesa, negro como la noche y grande como mi fístula anal. No hablaba casi con nadie y se pasaba los breaks, los descansos, sólo en la calle. Cuando llovía a veces se quedaba dentro. Dentro nos reuniamso todos en una sala muy chica. Sin sillas suficientes y con un monton de acentos ahogando las palabras en una jauría con un curioso olor a sobako. Si el se quedaba dentro se sentaba en una silla y comía. Comía lento el muy cabrón. En el fondo todos esperabamos que terminase de una puta vez, porque quieras o no estas cosas te cortan el rollo. Un negro loco comiéndo a tu lado sin emitir un solo sonido es algo...extraño? nos da miedo lo extyraño. No parar de hablar es extraño. Nos encanta no parar de hablar, ser personajes de Tarantino. Por eso Zana acojonaba, pokito, pero acojonaba. Cuando terminaba la comida se quedaba ahí. A veces sonreía o simplemnte nos miraba. Si le preguntabas sonreía con sus enormes dientes blancos y contestaba. Pero no se extendía mucho. Era educado el muy cabrón. Eso no se le podía discutir.
Un día un amigo polaco me dijo que le había dicho el manager que Zana estuvo en la cárcel en su país centroafricano durante buena parte de los horriblemente (estilísticamente hablando) años 90. Lo mismo se quedó por eso Zana de esta manera en que le conocí. Quizá le habían jodido tantas veces en aquella cárcel llena de negros guerrilleros que aprendió a ser siempre educado aunque te estuviesen retorciendo las pelotas, y aponer el culo en cuanto oias el sonido de tu puerta abrirse. Debió aprender también a que todo le importase una mierda. Yo habría aprendido, pero algo latía dentro de ese gran negro, de ese big boss como le llamábamos. No tenia ni familia ni pareja, pero ahí seguía. Y no tenía pinta de dejarse llevar. A ese hijodeputa todavía le quedaba una brizna de esperanza guardada entre las entrañas, unas gotas de ilusión. A ese hijodeputa todavía debía quedarle un sueño
Zana fue un tipo africano con el que trabajé. Era callado como una mesa, negro como la noche y grande como mi fístula anal. No hablaba casi con nadie y se pasaba los breaks, los descansos, sólo en la calle. Cuando llovía a veces se quedaba dentro. Dentro nos reuniamso todos en una sala muy chica. Sin sillas suficientes y con un monton de acentos ahogando las palabras en una jauría con un curioso olor a sobako. Si el se quedaba dentro se sentaba en una silla y comía. Comía lento el muy cabrón. En el fondo todos esperabamos que terminase de una puta vez, porque quieras o no estas cosas te cortan el rollo. Un negro loco comiéndo a tu lado sin emitir un solo sonido es algo...extraño? nos da miedo lo extyraño. No parar de hablar es extraño. Nos encanta no parar de hablar, ser personajes de Tarantino. Por eso Zana acojonaba, pokito, pero acojonaba. Cuando terminaba la comida se quedaba ahí. A veces sonreía o simplemnte nos miraba. Si le preguntabas sonreía con sus enormes dientes blancos y contestaba. Pero no se extendía mucho. Era educado el muy cabrón. Eso no se le podía discutir.
Un día un amigo polaco me dijo que le había dicho el manager que Zana estuvo en la cárcel en su país centroafricano durante buena parte de los horriblemente (estilísticamente hablando) años 90. Lo mismo se quedó por eso Zana de esta manera en que le conocí. Quizá le habían jodido tantas veces en aquella cárcel llena de negros guerrilleros que aprendió a ser siempre educado aunque te estuviesen retorciendo las pelotas, y aponer el culo en cuanto oias el sonido de tu puerta abrirse. Debió aprender también a que todo le importase una mierda. Yo habría aprendido, pero algo latía dentro de ese gran negro, de ese big boss como le llamábamos. No tenia ni familia ni pareja, pero ahí seguía. Y no tenía pinta de dejarse llevar. A ese hijodeputa todavía le quedaba una brizna de esperanza guardada entre las entrañas, unas gotas de ilusión. A ese hijodeputa todavía debía quedarle un sueño
es un time to pretend, we`re fated to pretend.....
molaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
5 comentarios:
Lo del negrote ese se llama sabiduría, ¿no? Al menos se acerca mucho e mi idea de lo que significa ser sabio.
Segunda: ya escribirás ese libro cuando Paper haya terminado de vender el suyo.
Si no, se va a saturar el mercado de libros de blogueros maricas criticones.
Si no, se va a saturar el mercado de libros de blogueros maricas criticones.
Yo creo que le pasa a Zana no es que las pasara muy putas hace años o no, sino que pertenece a ese casi extinto grupo de gente cada vez menos numeroso pero igualmente ruidoso que somos los idealistas.
Besos.
Besos.
Ese lugar donde estabas parece un poco una casa de locos y Zana me recuerda al indio que simulaba ser sordomudo de "Alguien voló sobre el nido del cuco", a lo mejor era el más lúcido de todos, lol
jag
pd; ¿me perdonas mi prologada ausencia? quería huir, sobre todo de mí mismo, pero soy como audrey en breakfast at tyffany´s, a veces nos construimos nuestra prision y nos quedamos allí, sabiendo lo que nos espera afuera, un besote, english boy
jag
pd; ¿me perdonas mi prologada ausencia? quería huir, sobre todo de mí mismo, pero soy como audrey en breakfast at tyffany´s, a veces nos construimos nuestra prision y nos quedamos allí, sabiendo lo que nos espera afuera, un besote, english boy
pd.- si en tu libro contaras cosas como estas, yo lo compraba fijo... XDDD